RIQUEZAS Y LOS MUNDOS SUPERIORES
- Sar Itzjak
- 18 jun
- 2 Min. de lectura
Actualizado: 19 jun

ORIGEN DE LAS RIQUEZAS
“Las riquezas, el honor y la gloria proceden del Melej haOlam — el Rey del Universo.
Tú, Señor, riges y dominas sobre todo; en tu mano está la fuerza y el poder.
Solo tú puedes engrandecer y otorgar poder absoluto a tus fieles.”
Tuya es la grandeza, oh Rey del Universo:
la magnificencia, el poder, el honor, la gloria, la victoria y la majestad.
Porque todo cuanto existe —en el cielo, en la tierra y debajo de la tierra— es tuyo.
El Reino es tuyo. El Imperio es tuyo.
Tú eres exaltado como Cabeza sobre todo.
Por lo tanto, nuestro Elohim, te alabamos y glorificamos tu Nombre.
Todo es tuyo, y de lo que recibimos de tu mano te damos.
Toda buena dádiva y todo don perfecto desciende de lo alto, del Padre de las Luces Esféricas, quien creó las lumbreras celestiales, en quien no hay mudanza ni sombra de variación.
Lluvia desde los mundos superiores
Todo en la tierra es resultado de una lluvia constante desde los mundos superiores.
No hay nada manifestado en lo físico que no exista primero en lo invisible.
El universo opera bajo los principios eternos de los mundos superiores.
Aun si un hombre no religioso aplica principios espirituales de prosperidad y abundancia, indefectiblemente prosperará, aunque en otras áreas de su vida esté quebrantado o estancado
Riqueza, como ley universal
Las riquezas funcionan como la ley de gravedad: todo lo que sube, retorna.
Las riquezas operan como el ciclo planetario del agua.
No llueve desde el universo hacia la tierra como si llegan los rayos del sol de manera exógena, el agua consumible no gravita en el espacio, es un elemento vital que opera en un ciclo repetitivo exclusivamente dentro de nuestra esfera terrestre. Las fases del ciclo hidrológico son: Evaporación, condensación, precipitación… otros.
Así como las leyes físicas operan sin falla alguna, así también las riquezas fluyen dentro de un ciclo espiritual exacto: suben como intención, bajan como manifestación.
Prosperidad magnética
El dinero y los bienes materiales se atraen de forma magnética e inconsciente a niveles suprahumanos desde los mundos superiores, cuando una conciencia humana se sincroniza con los principios universales de espiritualidad
Las riquezas son frecuencia y resonancia
Y esa frecuencia se activa cuando vivimos según los mandamientos y principios que el Melej haOlam estableció desde los orígenes.
No importa la religión que practiques, ni el nombre que le des a lo sagrado. Si deseas activar la abundancia real: bendiciones divinas, dinero, riquezas y materializar todo tipo bienes.
Actívate, haz llover sobre tu vida con:
Pensamientos de plenitud, palabras de expansión, hábitos de excelencia y acciones concretas de prosperidad.
Las riquezas, la gloria y el poder proceden del Rey del Universo.
ACTIVA un bucle de ABUNDANCIA infinita.
Sar Itzjak III
Behatzlaja.




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